martes, 6 de mayo de 2014

--Arrepentíos y Preparad la Vía del Señor,-- Alma 7:7-9

Alma 7:7-9

 Este mandato particular resuena con mí, probablemente por causa de mis circunstancias personales en este momento. Sino, parece que lo personal y instrucción individualizado tiende ser lo más universalmente convincente al mismo tiempo.

Alma declara que el Espíritu había dicho a él para decir al pueblo de Gedeón:
Proclama a este pueblo, diciendo: Arrepentíos y preparad la vía del Señor, y andad por sus sendas, que son rectas; porque he aquí, el reino de los cielos está cerca, y el Hijo de Dios viene sobre la faz de la tierra.  (vs. 9)
En el capítulo 9, se halla un relato distinto  donde Alma esta entre el pueblo de Ammoníah. En este instante, es la voz de un ángel que ha instruido a Alma:
 Y por esta causa, para que no seáis destruidos, el Señor ha enviado a su ángel para visitar a muchos de los de su pueblo, declarándoles que deben salir y clamar fuertemente a este pueblo, diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos está cerca;


Y de aquí a pocos días el Hijo de Dios vendrá en su gloria; y su gloria será la gloria del Unigénito del Padre, lleno de gracia, equidad y verdad; lleno de paciencia, misericordia y longanimidad, pronto para oír los clamores de su pueblo y contestar sus oraciones.
(Alma 9:25-26)
Estoy recordando que el mensaje del Evangelio de Jesucristo en nuestro día es la misma mensaje que Alma enseñó a su pueblo: --el reino de los cielos está cerca.--

En nuestros días, aún esta más digno de notar. Porque desde el tiempo en que Dios el Padre y Jesucristo apareció al muchacho José Smith, ha sido el establecimiento del reino de Dios sobre la tierra como el cumplimiento de uno de los grandes señales de los últimos días (Dan. 2:44, véase también DyC 65, 3 Ne 21). Su crecimiento ha sido como el crecimiento de un árbol. Pequeño y delicado al principio, con mucho cuidado tierno. Lo más que vive, lo más grande la fuerza y protección de ella. Y sin embargo, la crianza hoy día es más rápido y abundante que nunca. Su protección es más seguro y estable. Para los que trabajan en la obra, el Espíritu asociado con ella crezca más apremiante cada día, y el trabajo para recoger a los que creán esta acelerando (Isa. 49:22-23). En verdad, más cerca esta el reino de Dios como nunca antes.

 --El Señor Dios tiene poder para hacer todas las cosas que van de conformidad con su palabra,-- (Alma 7:8).

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