miércoles, 21 de septiembre de 2011

--Y Empezaron a Interrogarlo,-- Mosíah 12:17-19

Mosíah 12:17-19

Hay nota de pie en el versículo 19 por la palabra --resistió--, donde explique que Abinadi pudo resistir las interrogaciones de los sacerdotes inicuos. La nota de pie hace referencia a Doctrina y Convenios 100:5-6 donde describe la don espiritual que empleaba Abinadi. Es mi opinión que esto requiere una gran fe para ejecutar:
Por tanto, de cierto os digo, alzad vuestra voz a este pueblo; expresad los pensamientos que pondré en vuestro corazón, y no seréis confundidos delante de los hombres;
Porque os será dado en la hora, sí, en el momento preciso, lo que habéis de decir.
 ¿Cómo me mantengo en tal modo de discernimiento espiritual para poder oír los susurros del Espíritu a mi corazón? Me pregunto si en cualquier momento he podido hacer esto, es decir, hablar en el momento de necesidad. Hay unas pocas experiencias escogidas donde he sido bendecido para hacer esto en capacidad de misionario de barrio. Me supongo que aún tenia presente en la mente el mandamiento que sigue en el próximo versículo de la sección 100.
Mas os doy el mandamiento de que cualquier cosa que declaréis en mi nombre se declare con solemnidad de corazón, con el espíritu de mansedumbre, en todas las cosas.  (versículo 7)
Entonces, hay tres mandamientos para poder mantenernos en un modo espiritual: 1) que declaramos en el nombre de Jesucristo, 2) con solemnidad de corazón, 3) con un espíritu de mansedumbre.

Me confío en el siguiente versículo de escritura,--Ahora pues, ve, que yo estaré en tu boca, y te enseñaré lo que has de decir.-- (Éxodo 12:4)

jueves, 8 de septiembre de 2011

--¿Qué Gran Mal Has Hecho?-- Mosíah 12:9-16

Mosíah 12:9-16

Es una actitud común entre los inicuos para negar su iniquidad. En inglés, he hecho referencia a un par de escrituras para la frase --sin culpa-- que se encuentra en el versículo 14, donde la gente tomo una actitud similar.

Esto me hace preguntar, ¿cuál es la diferencia entre una persona inicua y una justa? La inicua profesará su perfección y estado sin culpa. La inicua persona hará preguntas tales como, --¿Qué gran mal [hemos] hecho?-- (vs.13) o --¿Cómo sabes que tenemos de qué arrepentirnos?-- (Alma 21:6) En todos casos, niegan la responsabilidad personal de haber hecho algo mal. Este punto es clavo en poder arrepentirse, y para ser justo. ¿Es esto la suma diferencia entre los inicuos y los justos?

Comparar esto con una actitud de un verdadero justo, quien en otras palabras se refiere a  --el que verdaderamente se arrepiente y humildemente busca la felicidad.-- (Alma 27:18) En Lucas 7, el centurión quien buscaba al Salvador para sanar a uno de sus siervos, dice, --Señor, no te incomodes, pues no soy digno de que entres bajo mi techo.-- (Lucas 7:6) El Señor luego concluye a este cuento al observar, --Os digo que ni aun en Israel he hallado tanta fe,-- (vs. 9).

jueves, 1 de septiembre de 2011

--Así Me Ha Mandado el Señor,-- Mosíah 12:1-8

Mosíah 12:1-8

Esta mañana cuando consideró a Abinadí, me vino el pensamiento de que estas palabras no son el carácter de Abinadí; él esta entregando las palabras del Señor. Me compela contemplar como era el carácter de Abinadí con niños pequeños. ¿Cómo interaccionaba con miembros de su familia? Desafortunadamente, de estas relaciones no tenemos registros.

Pero a tomar un momento o dos para reflexionar sobre la vida de Abinadí, en estos momentos de gran fe, Abinadí esta despidiéndose de su vida apacible para un fin difícil. Me supongo, que él sabe algo de este fin, pero que también habia recibido conocimiento del gran bien que también resultará si cumpla bien su misión singular.

El Señor esta ya listo para destruir a este pueblo. ¿Porqué mandó a un profeta primero? ¿Porqué no simplemente mataba a todos y olvidarse del inicuo pueblo? Me parece que la obra del Señor no es así, sino que esta profecía es el inicio de un gran movimiento para reorientar a este pueblo a Dios. De este perspectivo, es muy efectivo como inicio.